El ozono, por sus propiedades químicas, es un gas muy útil para la desinfección y descontaminación ambiental. Además es capaz de eliminar malos olores, sin dejar en el aire ningún residual químico, pues se descompone en oxígeno. Estos beneficios del ozono se pueden aprovechar también a través del agua ozonizada producida in situ por generadores de ozono u ozonizadores.

Gracias a generadores de ozono el agua se puede convertir en agua ozonizada, un desinfectante natural que resulta eficaz para lavar y desinfectar alimentos, como frutas y verduras, que quedarán esterilizados completamente, sin tener que usar ningún producto químico adicional. Además el ozono no deja ningún residuo en el alimento, por lo que este no necesita enjuagarse además de resultar totalmente seguro.

No solo se puede utilizar el agua ozonizada para frutas y verduras, sino también para alimentos como carne o pescado. El agua ozonizada permite eliminar todo tipo de bacterias y microorganismos patógenos que puedan encontrarse en los mismos.

Otro de los usos del agua ozonizada es el de limpiar y desinfectar artículos de cocina, sin dejar ningún tipo de residuo y de forma rápida y eficiente. De este modo, se pueden volver a usar esos utensilios casi al momento.

El agua ozonizada también es aplicable para limpiar y desinfectar las manos o la boca, e incluso los cepillos de dientes, asegurando una correcta higiene bucal diaria, al evitar enfermedades dentales y el uso de productos químicos.

En la industria agrícola el agua ozonizada puede jugar un importante papel, pues mediante el uso de un generador de ozono el agua se puede usar para regar los cultivos, eliminando virus, bacterias, esporas, hongos y cualquier tipo de microorganismo que pueda estar presente en el suelo y las raíces. Además, el agua ozonizada oxigena las raíces, lo que favorece el enraizamiento y la salud de las plantas, y no deja ningún residual químico en el proceso, pues termina descomponiéndose en ozono.

El agua ozonizada puede incluso ayudar a prevenir alergias lavando las sábanas y almohadas de las personas alérgicas, ya que el ozono elimina los ácaros y los alérgenos que habitan en estos elementos, que son la causa de las alergias que normalmente asociamos con el polvo.